Un proyecto que inició hace un año y que debía dar respuesta a la necesidad de reutilizar o almacenar de forma segura el gran volumen de plásticos usados en la Región Sur.
Ante esta necesidad, planteada por ambiente de Río Negro, la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Provincia propone aplicar la tecnología de pirolisis como alternativa para convertir estos plásticos en combustibles. Asociado a ello, “La Trochita” que estaba en pleno proceso de restauración para su puesta en marcha, significaba una excelente oportunidad para que estos combustibles tengan un usuario directo.
Otro factor importante, relacionado a la tecnología necesaria para lograr la pirolisis estaba también resuelto, gracias a la PyME Barilochense TRESB S.R.L., que cuenta con un gran conocimiento sobre el proceso de conversión de plásticos a combustibles y con el equipo profesional para llevarlo adelante.
Pasaron 12 meses de trabajo, tiempo suficiente para lograr el financiamiento que este proyecto se merece. Un año para que cada una de las partes involucradas lleve a cabo sus tareas, la Secretaría de Ambiente organizando cada punto limpio municipal para la recolección de residuos, la Empresa TresB haciendo las pruebas pilotos en su planta de Bariloche y la Secretaría de Ciencia y Tecnología articulando con los diferentes actores para hacerlo posible, además de obtener los recursos para que este proyecto se lleve a cabo.
La construcción de la planta, mediante un proceso termo-químico, procesará los plásticos y aceites usados de seis municipios de la línea Sur (Pilcaniyeu, Comallo, Ing. Jacobacci, Maquinchao, Los Menucos, Sierra Colorada, Ramos Mexia y Valcheta) y serán transformados en hidrocarburos más simples (combustibles).
La etapa inicial del desarrollo de la planta, la lleva adelante la Empresa TRESB, en su laboratorio de desarrollo de energías renovables de Bariloche. Una vez concluida, la planta será instalada en la localidad de Jacobacci y se licitará su operación.
De esta manera, permitirá que los residuos plásticos sean reusables y reciclables, evitando problemas en su disposición, obteniendo combustibles sin generar CO2 adicional a la atmósfera, impulsando la creación de empleos y nuevas empresas verdes en las que puede incluirse a las organizaciones de recicladores, y ampliando las soluciones en la gestión de residuos.
Este proyecto lo está llevando adelante la Secretaría de Ciencia y Tecnología (Ministerio de Economía), la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Tren Patagónico y la Empresa Tres B, financiado por el Gobierno de Río Negro y el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología (COFECyT).
Una inversión de más de $3.000.000 permitirá que en aproximadamente seis meses, la Trochita pueda realizar su primer viaje con Combustible Limpio. Y que los residuos plásticos sean reutilizados.
¿Cómo se hace un combustible limpio? Las etapas de proceso de pirolisis
El proceso lleva varias etapas, la primera es la recolección y selección de plásticos, luego su molienda y/o prensado para luego ir al horno de pirolisis, donde se producen moléculas de hidrocarburos en estado gaseoso (500ºC), que luego de un proceso de destilación, se transforman en aceites, tipo gasoil o solventes como las naftas. Al no producir oxidación, como el caso de la incineración directa (quema de plásticos), evita la formación de contaminantes como furanos y dioxinas. Esto permite reciclar los plásticos, proveer de combustible a “La Trochita” y contribuir considerablemente al impacto positivo sobre el ambiente.
Como tal, los combustibles derivados de residuos plásticos no contienen heteroátomos, como Azufre, Cloro, Nitrógeno, Fósforo, Bromo ni Fluor, por lo cual no se produce una contaminación apreciable al ser utilizados como combustibles vehiculares. Su combustión, como la de los así llamados combustibles limpios producirá solo CO2 y vapor de Agua.